domingo

capitulo tres


Al cerrar y abrir las compuertas, varias veces, para que se ventilen las respuestas, las palabras que la incendiaban recorrían ahora los aires de lo externo.
Lentamente podía sentirse atravesando paredes hasta ese momento ocultas.
Arrancó un punto de la oración, entonces sonaba todo el tiempo, como si el disco estubiera rayado. Y le gustaba. Siempre le gustó eso de repetir hasta cansar, consumirlo hasta desvanecerse y caer y golpearse y sangrar.
Desde dentro, puro incentivo al máximo para sucumbir y volver al punto, y refrescar otra vez.

Capítulo dos


Cuando una sola gota me trae todo lo que parecía un océano.

Cuando se resuelve,
justo cuando dejé de apurarme.

Soy dia-amante de tus respuestas
Soy el vuelo que sigue.
Soy el cuaderno al lado de la cama.

Mi recordatorio vuelve a sonar.
Suena diciendo que sí.
Un sí intermitente.

martes

Capitulo uno


Siempre lo supo. Lo percibió. Pero no estaba atenta. Por más que le gustaba en ese momento ser solamente alguien ingenuo, lo depositó. Todo lo que pudiera llegar a permanecer, sin importar el tiempo en el espacio que seguiría adelante de ese día, esos días, esos ojos, esa música, y el humo, la lluvia, las zapatillas mojadas.
La tierra era la única cosa que podía llegar a calmar cuando no había alguien que le haga cosquillas en la nuca, o en el brazo.
Escarbar y encontrar las lombrices largas, sentir la humedad y su olor, la vida escondida y oculta, parecida a todas las fantasías creadas en solitario, hondo, adentro, en el fondo del pasillo de su conciencia.
Nada se sabía de la presencia, pero si del presente.

martes

lucia y el sexo


En el amor
en el temblor
en la penumbra
todo termina
y vuelve al mar.
El apuro no es constante para cambiar la historia
El temor
en el amor
lo escondido es el tiempo,
los deseos.
El sabor
del amor,
lo que quieras esta ciego
pero que tonto!

Te regalo mi ceguera pero mis ojos no...

martes

Estaba como a unas cuadras de mi casa, con un carton en la mano (como si fuera una bandeja) llena de piezas,
algo asi como un rompecabezas...
(!)
y en una, a dos cuadras de la esquina de mi casa, se me cae una pieza.
Un muchacho con una nena justo pasan, la levantan del piso y me la dan.
Gracias! le dije de una forma extraña, porque mi cuerpo empezó como a emborracharse, arrastrarse,
hasta q se me hacia muy dificil caminar.
Estaba a una cuadra de mi casa
y era tan dificil caminar que me agarraba de la pared con la otra mano para poder avanzar aunque sea un paso.
Llegaba a la puerta de casa, y alguien me esperaba


lunes

capitulo feriante


hay claves específicas todos los días para retribuirme que las puertas siguen ahí, intactas, apunto de ser abiertas, o meor aún: ofreciendome increibles posibilidades de visualizar quichicientos mundos que siguen, pero no... eso ya es demasiado

sábado

Capítulo 93 . para mirar de cerca








secuencia hecha recientemente con dos ex libris (uno a la mujer salvaje, otro a Hunderwasser)
junto a extractos del capitulo 93 de Rayuela (Cortázar)


porque hoy a la mañana, andando en bicicleta, el sol estaba ahí de frente, redondo, algo ámbar, gritandome en la cara fría, que SI, que hola, otra vez.
por algo es